La revista MAD edición Argentina, despareció de los kioskos ya que su humor no hizo gracia a la jerarquía eclesiástica, ni a los militares que detentaban el poder. Sucedió en plena década del 70 cuando Videla enfrentaba al demonio del comunismo. Sólo se habían presentado 60 números. Su condición de revista norteamericana no le salvó el pellejo. Aquí su historia.
Era una época de autoritarismo absoluto, con la censura como dueña y señora de ideas y opiniones, y con los derechos humanos sin cotización oficial. Vivíamos el “Proceso Militar de Reorganización Nacional”, una dictadura con personas y actitudes sangrientas que se ganó el mal recuerdo de nuestros contemporáneos.
Las prohiciones estaban a la orden del día. Un libro como “La cuba electrolítica” terminaba en las llamas, aunque era de física-química. La cultura y la información fueron víctimas de un proceso imbécil y retrógrado.Hasta una revista norteamericana terminó mal, aunque parezca increíble.
La revista MAD es de orígen yanqui y sigue vigente en su país. Tenía ediciones en varias partes del mundo, y en esos años del 70 había iniciado la publicación de su edición argentina, quizás pensando que un humor “capitalista” no molestaría a los dictadores.
La revista MAD es de orígen yanqui y sigue vigente en su país. Tenía ediciones en varias partes del mundo, y en esos años del 70 había iniciado la publicación de su edición argentina, quizás pensando que un humor “capitalista” no molestaría a los dictadores.
En su tapa siempre estaba la caricatura de Alfred Newman, un compositor y director de orquestas de la década del 50, que luego se transformó en el personaje central de historietas de MAD.
Su humor era gráfico, hacían excelentes parodias de series y películas. Era desenfadada, con un humor que se asemeja a lo que hoy nos hace reír de Los Simpson. Se dice que Bart es fanático de esa revista legendaria y en un capítulo de la serie, que no ví, mientras estaban en Nueva York, Bart le pide a Homero que lo lleve a la redacción de la revista MAD. Así cuentan algunos fanáticos.
MAD mantenía el estilo yanqui del humor, con la libertad que los caracterizaba en muchos temas que en este país de uniformes militares eran tabú. Las traducciones aggiornaban la publicación, pero sus dibujos eran claramente norteamericanos. No era una revista de humor político, como lo fue “Humor Registrado” pocos años después, que sumó al chiste, la denuncia hacia un sistema político perverso y asesino.
Viniendo del gran país del norte nadie hubiera pensado el final que MAD tuvo en el país del Proceso de Reorganización Nacional. Cometió el deslíz de trasladar al castellano un chiste que en Estados Unidos fue tolerado.
Su humor era gráfico, hacían excelentes parodias de series y películas. Era desenfadada, con un humor que se asemeja a lo que hoy nos hace reír de Los Simpson. Se dice que Bart es fanático de esa revista legendaria y en un capítulo de la serie, que no ví, mientras estaban en Nueva York, Bart le pide a Homero que lo lleve a la redacción de la revista MAD. Así cuentan algunos fanáticos.
MAD mantenía el estilo yanqui del humor, con la libertad que los caracterizaba en muchos temas que en este país de uniformes militares eran tabú. Las traducciones aggiornaban la publicación, pero sus dibujos eran claramente norteamericanos. No era una revista de humor político, como lo fue “Humor Registrado” pocos años después, que sumó al chiste, la denuncia hacia un sistema político perverso y asesino.
Viniendo del gran país del norte nadie hubiera pensado el final que MAD tuvo en el país del Proceso de Reorganización Nacional. Cometió el deslíz de trasladar al castellano un chiste que en Estados Unidos fue tolerado.
En el número de enero de 1978, página 43 aparece una caricatura de un sacerdote, párroco de una iglesia de un barrio pobre y negro, similar a lo que podemos ver en televisión como Harlem, en Nueva York. El cura, en la caricutura, exhibe una iglesia de proporciones lujosas frente a las ruinosas casas de sus feligreses. Delante de la puerta de esa iglesia un automovil de lujo, tipo limousine, aguardaba al cura. Este en el atrio dialoga con otro cura sobre la forma en que mantiene su Iglesia:
SUBIRÉ AL DOBLE LA CUOTA DE LA ESCUELA, DISMINUIRÉ LOS SUELDOS DE LOS MAESTROS, PONDRÉ ALGUNOS NEGOCIOS MÁS DE LOTERIA Y PRODE, INVENTARÉ RIFAS Y KERMESES DOMINICALES, PEDIRE LIMOSNAS Y DONACIONES…LO DE SIEMPRE.
El inocente chiste despertó al león por su inmoralidad. Osvaldo Ripoll, director de MAD, fue detenido arbitrariamente, agredido en prisión, amenazado y obligado a dejar el país. Pudo regresar 6 años después. La revista MAD EDICION ARGENTINA nunca más se publicó. Según se supo en esos días sectores religiosos afectados por el humor ácido de MAD se movieron para que Ripoll dejará de editar su publicación.
Hoy MAD cotiza en el mercado de los coleccionistas a precios superiores a los $ 50,- y en el exterior hasta U$S 100 el número. Se consiguen muy pocos. Se editaron 60 números a lo largo de 5 años.
¿Donde estarán aquellas revistas MAD que leía cuando tenía 15 años, en pleno proceso militar?. Las mías no sé, quizás perdidas en el tiempo. Pero las que estaban en depósito en esa época y en los escaparates de los kioskos terminaron en un incinerador de la Policía Federal.
Claudio Scabuzzo La Terminal https://laterminalrosario.wordpress.com/2008/03/13/la-revista-mad-argentina-y-el-proceso-militar/
Comentarios
Publicar un comentario