Ir al contenido principal

Sexofobia por Alfredo Grande

(APe).- No tengo el disgusto de conocer a Héctor Aguer. Y habiendo tantos motivos para pasarla mal, no creo que lo incorpore en la lista. Héctor, el mítico héroe que defendió el honor de Troya, siendo vencido por el legendario Aquiles, no le cabe como nombre al inquisidor sexual. Pero me alegra que lo haya dicho. Porque Héctor se ubica en ese lugar donde nadie quiere estar. En lo fundante de la cultura represora.

Héctor ha producido, bien que le pese, el más formidable analizador para entender, incluso a honestos creyentes, que es el fundamento de la cultura represora: el exterminio del placer. Corporal sin duda, pero no solamente. Los anatemas sobre libros, la censura y represión de ideas, haber liderado todas las noches oscuras de la historia, indican que el placer mental, intelectual, espiritual, también debe ser castigado.

Héctor sabe, y quizá lo haya sufrido, pero con seguridad lo hace sufrir, que el placer puede generar dependencia, pero nunca sometimiento. Que el placer cuando genera dependencia, abre el camino a la autonomía y a la libertad.

El sometimiento por el contrario, avala el destino de todas las formas de la esclavitud. Héctor nos ahorra el tiempo perdido en el remanido “¿Qué habrá querido decir?”. Muy alejado de los laberintos semióticos de Carta Abierta, lo de Héctor es una carta, patética, pero carta al fin, que de tan abierta se le puede entrar por cualquier lado.

Héctor ha unido -no es el único, pero quizá como uno de los últimos jerarcas desnudos- la fornicación con la mortificación. Porque no puede ir lo uno sin lo otro. En una canallada cuasi sacramental, cuestiona la entrega de preservativos. Calcula el uso dado, y quizá, y hasta allá llega su sinceridad, imagine aquellos puertos en los cuales los preservativos amarran las cajas y los plásticos.

Si lo aterra que se coja (sic) 1 atléticamente, quizá prefiera que se coja (sic) 2 en forma profesional. Podría haber echado algún rayo y centella contra el delito de lesa sexualidad que es el abuso sexual de niñas y niños, la prostitución a escala industrial que algunos llaman “la trata”, y ya que no estamos, la pedofilia. Puedo acercarle info chequeada sobre el caso Pacheco Melo. Se lo pido a ENRED Mar del Plata, y en minutos le llega.

La fornicación la confunde con una fábrica de humanoides, despojados de deseo y de vergüenza. Vergüenza por desear. Incluso a la propia mujer, además de la del prójimo. Algo así como un fordismo sexual. Pero en su brutal necedad, les da a los hijos la misión imposible de reprimir la sexualidad de la madre y el padre. O sea: aunque pagues el peaje, la barrera del placer sigue baja.

La molestia del “petting” (sic) 3 es por hacerlo en lugares públicos. Héctor seguramente prefiere la cruel práctica de la pedofilia, siempre realizada en lugares privados. Bueno, clandestinos. Que no es lo mismo y que no es igual. La pacatería y cinismo de Héctor lo lleva a una cruzada anti concepción. La sabia naturaleza nada sabe de las burradas de Héctor. Y por suerte para todos, porque en otro diluvio universal ya no salvaría ni siquiera a dos por cada especie.

Además, por cosas menos graves que las que dijo Héctor, algunos filósofos fueron quemados vivos.

Horrorizado por la adopción de niños por parejas no heterosexuales, confunde amor con género. Quizá nada sepa de ambas cosas. El embarazo no deseado, o sea, el embarazo por mandato, el embarazo como castigo, el embarazo como freno al desenfreno y a la lujuria, el embarazo como marca del hierro candente de la monogamia, necesita método anticonceptivos totalmente inútiles.

Héctor, por favor. La naturaleza nada tiene que ver con los ciclos de fertilidad de una mujer. La mujer no es un mamífero. No es la hembra de una especie de primate superior. Lamujer, como el varón, son cultura. A veces liberadora, a veces, y gracias a personas como vos, represora. Pero nada tiene que ver la naturaleza en esto. Ni en esto ni en el estro. El deseo sexual es independiente de la potencia reproductiva.

No creo que tu ignorancia sea tal. Me inclino a pensar en un mecanismo de pensamiento perverso, capturado por lo peor de dios y lo mejor del diablo, que busca todo tipo de cruel alquimia que despoje al humano de su capacidad de placer. No solamente fusionándola con la culpa, terrible constructo represor en el cual participaron todos los príncipes y patriarcas de todas las iglesias, sino exterminando de raíz el irresoluble problema que los gerentes del placer y la sexualidad no hay podido resolver

Y en la repugnancia de tus palabras, asocio con el anatema que colgué hace años sobre la testa de Won Wernich, capellán torturador: cerdo de dios. Te cabe como preservativo hecho a medida.

Preocúpate más por hambre de tus ovejas, ya que no hay buen pastor que se ocupe de encontrarlas y cuidarlas.

Gracias a compañeros como Ruben Dri, Gerardo Duré, Rafael Villegas, Carlitos Cajade, Eduardo Pimentel, y tantos otros y otras, entendí que otra religión no sólo es posible, sino que también es necesaria.

En el fundante de todas las libertades está la libertad sexual. Libertad para el placer. Libertad para todos los placeres. No hay peajes, ni corrales, ni murallas que frenen el deseo. La vida, esa que merece ser vivida, no la tuya Héctor, siempre se abrirá paso. Por eso te cuento lo que dije en una de las reuniones del Seminario de Formación Teológica: “la fe es otro de los nombres del deseo”.

Por favor, Héctor. Por tu incurable sexofobia, no invoques este aforismo implicado: será en vano.

Pero te dedico versos de Silvio Rodríguez, asumiendo que nada de él conocés y menos practicás.
ojalá se te acabe la mirada constante 

la palabra precisa, la sonrisa perfecta 
ojalá pase algo que te borre de pronto 
una luz cegadora, un disparo de nieve 
ojalá por lo menos que me lleve la muerte 
para no verte tanto, para no verte siempre 
en todos los segundos, en todas las visiones 
ojalá que no pueda tocarte ni en canciones

Edición: 3220


Comentarios

Entradas populares de este blog

El origen de la chacarera

La chacarera es un ritmo y danza folclórica tradicional de Argentina, originaria de la provincia de Santiago del Estero. Ha llegado a extenderse por toda la Argentina y una parte del sur y oriente de Bolivia (región del Chaco). Se ejecuta tradicionalmente con guitarra, bombo legüero y violín. Es sin duda una de las danzas más antiguas del folclore argentino y es en la actualidad una de las más vigentes. De ritmo alegre y vivaz y gran arraigo en todo el Noroeste argentino, la región central y parte de cuyo, aunque si hablamos de chacarera, hablamos de Santiago del Estero, donde es la reina. La chacarera es una danza vivaz que, como la mayoría de las danzas Folklóricas argentinas, se baila en pareja. Esta es suelta (ya que los bailarines no se tocan) e independiente, es decir que hacen solas sus evoluciones, sin combinarlas con las de otra pareja. Pertenece al grupo de danzas picarescas, de ritmo ágil y carácter muy alegre y festivo, gozó de la aceptación del ambiente rural y ta...

Ibrahim ibn Ya'qub la historia de un viajero sefardi

Ibrāhīm ibn Yaʿqūb (en árabe, إبراهيم بن يعقوب, también transcrito Ibn Jakub o Ben Jakub o Ibrahim Ibn al Jaqub al Israili at-Turtushi) o Abraham ben Yacov (hebreo), comerciante judío del Califato Omeya de Córdoba, natural de Tortosa, que viajó por la Europa Central y Oriental durante la segunda mitad del siglo X. En los años 960-970 viajó, por orden del califa de Córdoba, para comerciar con esclavos y para recibir audiencia de Otón el Grande, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico. Este viaje le llevó a Irlanda a través de Burdeos y Noirmoutier. Luego atravesó el imperio de norte a sur, pasando por Utrecht, Maguncia y Fulda, visitando las tierras del reino de los checos y, a orillas del Vístula, la ciudad comercial de Cracovia. Finalmente abandonó Europa por Sicilia. El informe que escribió al regreso de su viaje es el primer documento escrito sobre las ciudades de Praga y Cracovia, así como de Vineta, además de relatar con detalle la vida y las costumbres de los pueblos eslav...

Salud. De un obrero alemán que no mata trabajadores. Una hermosa leyenda urbana

En 1937, como parte de la ayuda que le brindó Hitler a Franco para vencer al bando de los republicanos, socialistas y anarquistas durante la Guerra Civil Española, el temible equipo de aviación alemán llamado “Lutwaffe” bombardeo varias ciudades españolas. Cuenta la leyenda urbana que en un pueblo de el País Vasco hubo una bomba que llegó a tierra pero nunca estalló.  La bomba había quedado incrustada en el medio de la plaza central del pequeño poblado.  Los pobladores sorprendidos y asustados no se animaron a moverla, y mucho menos desarmarla y allí permaneció años durante el gobierno de Franco como un símbolo aleccionador.  Claramente representaba la muerte, el poder del régimen y el castigo a quien se rebelara. Una día de primavera, por la mañana, Julen se cansó del detalle del paisaje que arruinaba la plaza. Buscó herramientas, pidió ayuda que no encontró, y se decidió a desarmar y quitar el artefacto. Las primeras horas trabajó solo, ant...